La reina de los corazones – Parte 1
- Compass.

- 3 oct
- 6 Min. de lectura
Actualizado: 10 oct
Autor: Guillermo Beguerisse Hormaechea
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Corea es una nación que existe tras siglos de fricción entre civilizaciones, imperios e ideologías. Aún dividida, su supervivencia se cimenta en ideales nacionales que sobrevivieron en la mente, boca y manos de algunos personajes que no dudaron en imaginar la posibilidad de una patria. Esta es la fascinante historia de la mujer que con sus sueños y obras se ganó los corazones de los habitantes del país que imaginó.

Reina Min – origen y fecha desconocidas
En octubre de 1851, durante el reinado de la dinastía Joseon sobre la península de Corea, nació una niña a la que el destino le tenía reservado un lugar en la primera fila del choque de naciones que se dio en el Extremo Oriente durante el siglo XIX. Su padre murió cuando ella sólo tenía ocho años y quedó bajo el cuidado de su madre, pero una familiar se interesó especialmente en ella: su tía Min, esposa de Yi Ha-eung y madre del rey Gojong. Yi Ha-eung, más conocido como Heungseon Daewongun («Daewongun» significa Gran Príncipe Interno), era el regente de Joseon durante la minoría de edad de Gojong. Heungseon estaba preocupado porque los suegros del rey se entrometían mucho en el poder y quería una nueva reina que no trajera parientes que interfirieran en sus políticas. Su esposa encontró en su pequeña sobrina a la candidata ideal y así a los dieciséis años Min Ja-yeong se convirtió en la vigésimo sexta reina de Joseon.
Las reinas consortes se dedicaban a organizar fiestas de té, a cotillear y a marcar tendencias de moda; sin embargo, la reina Min no tenía ningún interés en esos pasatiempos. Se dedicó a leer extensamente sobre historia, ciencia, política, filosofía y religión, y así afiló su intelecto y adquirió la educación que normalmente se reservaba para los hombres nobles. Pronto Heungseon se dio cuenta de que había elegido a la nuera equivocada para sus planes de dominio y en poco tiempo Min y él se convirtieron en enemigos. Heungseon intentó debilitar el poder de la reina dándole a su hijo una nueva consorte que en poco tiempo le dio un hijo. Indudablemente esto encantó a Gojong y puso a Min en el segundo plano. Aunque ella no se rindió con tanta facilidad y logró concebir a los veinte años, casi cinco años después de su matrimonio. Mas, el varón que nació murió trágicamente a los tres días. La reina consultó a los mudang, los chamanes de la corte, y así descubrió que Heungseon había envenenado al bebé. Desde ese momento la reina Min juró vengar la muerte de su hijo.
Con el débil apoyo de su esposo —quien ya era mayor de edad—, Min comenzó a nombrar a miembros de su clan a cargos altos dentro de la corte, aunque su suegro seguía siendo quien realmente gobernaba. Con distintas maniobras y mucha paciencia, logró que Gojong incluyera en la corte a un erudito confuciano llamado Cho Ik-Hyon. A través de Cho, Min fue convenciendo a su esposo para que gobernara plenamente y sin la ayuda del «invirtuoso» Heungseon. Pero el regente no tenía intención de dejar a un lado el mando y envió asesinos para matar a Cho, obligándolo a huir al exilio. Aun así, el 5 de noviembre de 1873, el rey de 22 años anunció que gobernaría por derecho propio. Esa misma tarde la reina Min prohibió que Heungseon volviera a entrar al palacio.

El Daewongun Heungseon - Homer B. Hulbert - Foto de 1898 o anterior
La semana siguiente, una explosión y un incendio sacudieron el dormitorio de la reina, pero ni ella ni sus asistentes resultaron heridos. Unos días después, un paquete anónimo entregado al primo de la reina explotó, causándole la muerte a él y a su madre. La reina Min estaba segura de que Heungseon estaba detrás de los atentados, pero no podía demostrarlo. Como si los problemas dentro del palacio no fueran suficiente, en cuestión de meses la realidad se implantó afuera de sus puertas. Representantes del Japón Meiji se presentaron para exigir tributo. Joseon había sido durante mucho tiempo tributario de la China Qing —como también lo había sido ocasionalmente Japón—, y se consideraba del igual rango que el archipiélago, por lo que la petición era un sinsentido y Gojong despreció la petición. La corte coreana se burló de los emisarios japoneses por vestir ropa occidental alegando que ya ni siquiera eran japoneses y los deportaron. Esto fue un error gravísimo, pues Japón memorizaba las técnicas imperialistas de las potencias para aplicarlas y saciar sus intenciones expansionistas. En 1874, los japoneses regresaron y, contra los mejores consejos de la reina Min, forzaron al rey Gojong a firmar un tratado comercial para evitar problemas. Con este acuerdo como excusa, Japón envió el navío cañonero Unyo a la zona restringida alrededor de la isla de Ganghwa, a pocos kilómetros de Seúl, lo que provocó que las defensas costeras Joseon abrieran fuego. Japón respondió enviando una flota de seis buques de guerra. Bajo la amenaza militar, Gojong volvió a capitular ante las demandas japonesas y firmó el Tratado de Ganghwa, un acuerdo inspirado en el desigual Tratado de Kanagawa que Estados Unidos había impuesto a Japón tras la llegada de los buques de guerra del comodoro Matthew Petty a la bahía de Tokyo en 1854 —el Japón Meiji estaba aprendiendo con asombrosa rapidez las técnicas de dominación imperial—. Bajo los términos del tratado, Japón obtuvo el acceso a cinco puertos de la península coreana y a todas las islas que la rodean. Con dominación sobre las aguas, el estatus comercial especial y derechos extraterritoriales para los ciudadanos japoneses en Corea —para que cualquier nacional acusado de delito sólo pudiera ser juzgado bajo la ley japonesa— el creciente Imperio Japonés inició su dominación sobre Asia.
Entendiendo el peligro que se cernía sobre Joseon, la reina Min lideró la reorganización y modernización del ejército. También entabló relaciones con China, Rusia y otras potencias occidentales con la esperanza de reducir la creciente amenaza japonesa y para proteger la soberanía Joseon. Estas negociaciones resultaron en tratados comerciales desiguales que beneficiaban a las potencias, pero ninguna se comprometió a defender lo que denominaban el «Reino Ermitaño». Como resultado de ello, en 1882, la reina Min se enfrentó a una rebelión de oficiales militares de la vieja guardia que se sentían amenazados por sus reformas y por el aumento de la apertura a las naciones extranjeras. Conocido como el «Incidente de Imo», este levantamiento expulsó a Gojong y a Min del palacio y devolvió al poder a Heungseon. Decenas de familiares y partidarios de la reina fueron ejecutados y los restantes expulsados de la capital. Los embajadores de Gojong en China solicitaron ayuda y la dinastía Qing envió a 4,500 soldados que marcharon a Seúl, arrestaron a Heungseon y lo trasladaron a Pekín para juzgarlo por traición. Gojong y Min regresaron al Palacio de Gyeongbukgung y revocaron todas las órdenes de Heungseon. La tormenta parecía amainar pero sólo empeoró cuando en 1882 los embajadores japoneses en Seúl presionaron a Gojong para que firmara un nuevo tratado. De nuevo, el pusilánime rey accedió a pagar la indemnización por las vidas y propiedades japonesas que se perdieron durante el Incidente de Imo, y permitió la entrada de tropas japonesas en Seúl con el fin de proteger la embajada japonesa. Alarmada, la reina Min contactó de nuevo a los Qing y, a cambio de accesos comerciales reservados, solicitó que encabezaran la modernización del ejército ayudados por los alemanes. Era urgente y muy necesario tener una forma de defenderse de la amenaza extranjera, pero la reina Min aún tenía otro obstáculo que sortear, pero esta parte la podrá conocer, querido lector, en el artículo de la siguiente semana. Hasta la próxima.
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Fuentes:
Gale Review Team. 2022. The Murder of Empress Myeongseong of Korea . 16 de agosto. Último acceso: 10 de julio de 2025. https://review.gale.com/2022/08/16/the-murder-of-empress-myeongseong-of-korea/.
KBS. 2011. Empress Myeongseong, the greatest female politician of the Joseon Dynasty . 03 de noviembre. Último acceso: 10 de julio de 2025. https://world.kbs.co.kr/service/contents_view.htm?lang=e&menu_cate=history&id=&board_seq=60420&page=25&board_code=.
Szczepanski, Kallie. 2019. Biography of Queen Min, Korean Empress . 16 de mayo. Último acceso: 10 de julio de 2025. https://www.thoughtco.com/queen-min-of-joseon-korea-195721.
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