Autor: Guillermo Beguerisse Hormaechea
¿Contraseña?...
Todos conocen la maquinaria propagandística sobre la cual los nazis difundieron su mensaje y germinaron apoyo popular. Sin embargo existe un tipo de propaganda diametralmente opuesta, una que se hacía a pesar del peligro de muerte.
«Guerra y cadáveres, la última esperanza de los ricos»
En 1933, con la elección de Hitler, la Gestapo puso en su mira a un peligroso artista del fotomontaje. Éste disidente tuvo que dejar toda su colección en Berlín y huir a pie a Checoslovaquia. Desde ahí continuó criticando con imágenes ácidas y punzantes la atroz maquinaria del nacionalsocialismo, logró exponer su obra y desató la ira del Tercer Reich. Sus cófrades checos lograron resistir la presión alemana para desmantelar su exhibición y el intento de censura sólo aumentó la cantidad de visitantes interesados en el mensaje de este hombre. Su obra traspasó fronteras y se expuso en Francia para el sumo desagrado de Joseph Goebbels, el ministro de propaganda nazi. Goebbels controlaba la radio, la prensa, las publicaciones, el cine y las artes, sometió a artistas y periodistas al control estatal y promovió mensajes supremacistas y antisemitas por todos los medios posibles. En su mano tenía el control absoluto de la conversación, pero una espina se le clavaba entre los dedos. Este artista fugitivo no sólo esquivaba su agarre, sino que hacía quedar en ridículo a todo el gobierno del Tercer Reich. La Gestapo persiguió durante años y negoció con los gobiernos correspondientes la extradición a suelo alemán del artista llamado Helmut Herzfeld, aunque él prefería llamarse John Heartfield.
«¿Herramientas en la mano de Dios?
¡Juguetes en la mano de Thyssen!»
En 1916 Helmut Herzfeld decidió cambiarse el nombre como acto de protesta contra la Gran Guerra y contra el patriotismo alemán. Se convirtió en John Heartfield para desvincularse del odio alemán hacia los británicos y expresar públicamente su apoyo al bando aliado. Dos años más tarde se unió al Partido Comunista Alemán y comenzó su cruzada contra lo que él entendía como «arte burgués», es decir, no comprometido o separado de un contexto social o político. Lo procedente fue unirse al movimiento que igualmente estaba rompiendo con el arte como se concebía para señalar sus limitantes y dotarlo de una nueva plasticidad: el dadaísmo. El dadaísmo, en su variante más servicial, era un movimiento que apuntaba hacia alcanzar la libertad mediante la revolución social y la explosión de los valores burgueses —representados en el arte tradicional—. Bajo esta línea de pensamiento Heartfield creó fotomontajes con retoques visibles que permitían transmitir un mensaje por medio de la asociación de conceptos. La fotografía era un medio nuevo y podía usarse para mentir o revelar verdades en una sociedad aún iletrada sobre su lenguaje y alcance. Heartfield fue un pionero al encontrar ambos mensajes dentro de una imagen y hacerlos interactuar con los de otras fotografías para generar mensajes nuevos y certeros. Más allá del mensaje evidente de sus fotomontajes, descubrió que también podía cuestionar la autenticidad de una imagen y demostrar a las masas cómo debían mantenerse alerta de los engaños que podían sufrir si no desarrollaban una educación mediática y un criterio de distinción. Lamentablemente, el dadaísmo carecía de audiencia popular —como suele suceder con quienes quieren formular mensajes complejos y conclusiones originales— y para subsistir Heartfield comenzó a colaborar con un semanario comunista, el AIZ (Arbeiter Illustrierte Zeitung, Diario Ilustrado de los Trabajadores), la revista de mayor circulación durante la República de Weimar. En este medio publicó 237 fotomontajes, la mayoría de los cuales criticaban el ascenso del nazismo.
«Adolf El Superhombre - Traga Oro y escupe Estaño»
Tras escapar a Checoslovaquia, exponer en Francia y ser perseguido por la Gestapo, logró escapar a Inglaterra en 1938. Dos años después, ya con la guerra declarada y espías revoloteando por Europa, el gobierno británico lo encarceló por sospechar de sus intenciones. Finalmente lo liberaron y se mantuvo económicamente trabajando como ilustrador independiente para la editorial Penguin. Regresó a Alemania en 1950, donde finalmente fue reconocido por su trabajo y recibió una pensión vitalicia. Murió en Berlín del Este en 1968.
El método de Heartfield tenía como objetivo visualizar la realidad que se oculta detrás de la agitación social o de la agenda gubernamental. Sus fotomontajes no sólo ridiculizaban, señalaban o denunciaban, sino que también hacían caer en cuenta como los medios pueden ser manipulados por quienes los administran. Conocedor de las maneras en las que los medios populares podían —y pueden— persuadir la opinión de un pueblo, Heartfield utilizó sus mismas armas para desmantelar el mensaje con sátira.
Si bien en la actualidad la fotografía y sus hermanos (el cine y la televisión) ya no son medios nuevos, es verdad que su evolución en internet puede desalentar a la reflexión concienzuda y, como nunca había sucedido, al ensimismamiento colectivo. Cómo se unen y desarman mensajes ha evolucionado hasta el punto de personalizarse para envolver en una realidad individual tan ficticia como el mensaje en sí. Si aún hay algo que nos puede enseñar Heartfield es la importancia de educarnos sobre el tipo de medios que consumimos y la manera en la que entregan su mensaje. Más allá de divisiones sociales —o categorías marxistas— es una realidad que la información con la que nos pretenden alimentar no es la más nutritiva y que es nuestra responsabilidad buscar, informarnos y concluir con esfuerzo propio.
Si usted, apreciado lector, desea que este tipo de comportamiento independiente lo caracterice, una de las mejores maneras es por medio de leer y viajar de manera consciente, alejándose del consumo autómata y abriéndose a lo oculto detrás del tiktok más popular. Si tiene un viaje en puerta y desea desarrollar una mirada educada para distinguir aquello fuera de lo comercializable dé clic aquí. Que el conformismo no decolore su mundo, querido lector.
«Quien lee periódicos burgueses se vuelve ciego y sordo:
¡Fuera esas vendas embrutecedoras!»
Aprende más:
Nuestro libro recomendado es - Periplo - Viaja por el mundo con 100 cápsulas de su historia
por Fermín Beguerisse Hormaechea & Guillermo Beguerisse Hormaechea Descúbrelo en:
Fuentes:
Blumber, Naomi, y The Editors of Encyclopædia Britannica. 2024. John Heartfield. 15 de junio. Último acceso: 02 de julio de 2024. https://www.britannica.com/biography/John-Heartfield
Getty. 2024. Agitated Images: John Heartfield & German Photomontage, 1920–1938. Último acceso: 02 de julio de 2024. https://www.getty.edu/art/exhibitions/heartfield/#:~:text=John%20Heartfield%20was%20a%20pioneer,photographs%20to%20powerful%20political%20effect
Graphéine. 2022. John Heartfield, photomontage as a political weapon. 21 de noviembre. Último acceso: 02 de julio de 2024. https://www.grapheine.com/en/history-of-graphic-design/john-heartfield-photomontage-as-a-political-weapon
PBS. 2024. Joseph Goebbels (1897-1945). Último acceso: 02 de julio de 2024. https://www.pbs.org/wgbh/americanexperience/features/goebbels-biography/
The art story foundation. 2024. John Heartfield. Último acceso: 02 de julio de 2024. https://www.theartstory.org/artist/heartfield-john/
Comments