Autor: Guillermo Beguerisse Hormaechea
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Hoy tengo para ti la historia de dos hombres duros que impulsaron la exploración con decisión y valor. Personajes controversiales, propios de su época y con muchas aristas que considerar.
Richard Francis Burton
Richard Burton es el epítome del aventurero victoriano. Fue explorador, traductor, escritor, soldado, orientalista, etnólogo, lingüista, poeta, hipnotizador, esgrimista y diplomático. Por si la lista parece corta, él tradujo al inglés «Las mil y una noches», el «Kama-sutra» y hablaba veintinueve lenguas europeas, asiáticas y africanas. Nada de esto le vino sentado leyendo libros en un sillón en Devon. Nació en Inglaterra en una familia heredera de dinero y tradición militar que le permitió viajar por Europa durante su juventud e ingresar en el Trinity College de Oxford. Burton, inquieto por naturaleza, fue expulsado en 1842 y decidió alistarse en el ejército de la Compañía Británica de las Indias Orientales. Lo apostaron en India, donde aprendió a luchar y a viajar haciéndose pasar por local. Durante ese tiempo conoció el islam al detalle y, con su facilidad para hablar árabe, decidió emprender su aventura más ambiciosa: visitar La Meca disfrazado de musulmán. La empresa era peligrosísima, no sólo el viaje era largo y lleno de riesgos, si no que cualquier infiel que entrara en la ciudad santa del islam era castigado con la muerte. En 1853, demostró haberla visitado gracias a su conocimiento de los modales y la etiqueta oriental. Este logro lo reconoció como el mayor aventurero de su generación y no le fue difícil unirse tres años después a la expedición de la Royal Geographical Society para explorar las regiones lacustres de África central con la esperanza de descubrir el nacimiento del Nilo, un misterio desde que Alejandro Magno planteó la pregunta por primera vez. En esa misión conoció a John Hanning Speke.
John Hanning Speke
Speke era hijo de un oficial del ejército de la Compañía de las Indias Orientales. Joven y deseoso de hacerse un nombre propio se enlistó entusiasmado a la expedición bajo el mando de Burton. Nada lo hubiera podido preparar para lo que encontró. En la costa de Somalia, el grupo fue atacado por una tribu. A Burton le atravesaron la cara con una lanza y Speke resultó herido de gravedad. Tuvieron que huir para salvar sus vidas. Con razón o sin ella, Speke creyó que Burton había cuestionado su valor, lo cual le irritó de por vida y abonó a una antipatía creciente entre ambos. Burton se recuperó y se enlistó en un cuerpo de mercenarios en la Guerra de Crimea, pero pronto fue llamado a conducir otra expedición africana. Tragando su orgullo, Speke se le unió pues había rumores de un gran lago en el interior de África al que llamaban Mar de Ujiji que podía ser el deseado origen del Nilo.
Los exploradores se trasladaron tierra adentro desde la costa frente a Zanzíbar y en febrero de 1858 descubrieron el lago Tanganica. Después de tres meses de buscar sin encontrar la afluente del Nilo, Burton y Speke se enfermaron por el ambiente insalubre y tuvieron que regresar a la costa índica sin antes comprobar la veracidad del rumor de otro lago gigantesco más al norte. De los dos, Speke fue el primero en recuperarse y partió en agosto al mando de un grupo pequeño en busca de ese lago. Y lo encontró. Lo llamó Lago Victoria y, sin mucha evidencia, asentó que era la auténtica fuente del Nilo. Burton no reconoció la afirmación pues no le pareció que tuviera pruebas convincentes, pero Speke regresó a Inglaterra en mayo de 1859 antes que él lo hiciera y anunció su descubrimiento. La brecha que los dividía se ensanchó. La Royal Geographical Society envió a Speke de regreso para corroborar sus aseveraciones, pero tuvo dificultades pues sus intérpretes complicaron las negociaciones con los gobernantes locales y con los comerciantes árabes que los suministraban. Después de demoras impensadas, la exploración se acercó a Jartum en donde, tras intrigas políticas, el rey de Buganda, Mutesa, le permitió dirigirse al lago Victoria. Speke llegó a lo que llamó Cataratas Ripon el 28 de julio de 1862, la fuente del Nilo Blanco.
A pesar de que Speke no pudo seguir la corriente del río hacia el norte y eso dio oportunidad al escepticismo, en Londres fue recibido como un héroe. Por su parte, Burton se negó a admitir el descubrimiento y programó un debate con Speke en la Asociación Británica para el 16 de septiembre. Nunca se dio el encuentro pues, cazando perdices un día antes, Speke saltó un muro con el arma amartillada y se pegó un tiro. Su muerte, posiblemente accidental, se tomó como suicidio por pánico a enfrentarse a Burton. Años después se comprobó que estaba en lo correcto y que el Nilo Blanco empieza en el lago Victoria.
Fuente del Nilo
Considerados héroes y sinvegüenzas, Burton y Speke atraían la controversia. Sus métodos ofendían a muchos victorianos; sin embargo, su profundo interés por otras culturas contribuyó a la tradición de exploración del siglo XIX. Esta era ayudó a avanzar a la medicina, a la ciencia y a los estudios antropológicos. Demostró las diferencias que enriquecen a la humanidad y despertó el interés por «el otro». Hoy en día esa época se recrimina como una de colonialismo, apropiación cultural, robo de patrimonio o sencillo abuso. La realidad es más compleja que esa narrativa superficial. Sí hoy consideramos el arte africano, la escultura asiática o la pintura india como patrimonio cultural es porque el concepto mismo se desarrolló por aquellos exploradores europeos que vieron ahí el valor de una cultura. Su presencia en museos no se puede reducir a robos, sino a piezas que hoy vemos como robadas por que se les dio ese valor cosmopolita en dichos museos. Si bien, hoy hay posesiones que deberían reevaluarse y en ciertos casos resarcirse, un intercambio de bienes culturales puede ser más justo, enriquecedor y, sobre todo, interesante para la humanidad.
¿Qué opinión tienes de las acciones que tuvieron que tomarse durante el siglo XIX? ¿Qué piensas sobre las piezas de otras culturas en museos?
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Fuentes:
Cavendish, Richard. 2008. The Nile’s Source Discovered. 08 de agosto. Último acceso: 30 de mayo de 2023. https://www.historytoday.com/archive/nile%E2%80%99s-source-discovered
Alberge, Dalya. 2011. How feud wrecked the reputation of explorer who discovered Nile's source. 11 de septiembre. Último acceso: 23 de mayo de 2023. https://www.theguardian.com/books/2011/sep/11/burton-speke-african-exploration-nile
Princeton University Library. 2022. Sir Richard Francis Burton, 1821-1890. Último acceso: 30 de mayo de 2023. https://library.princeton.edu/visual_materials/maps/websites/africa/burton/burton.html
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